Babilonia y la puerta de Isthar, símbolo de la arquitectura babilónica
Babilonia, junto a la ciudad de Jerusalén, es una de las ciudades más universales de nuestra historia, entre otras cosas porque aparece mencionada en el Antiguo Testamento.
León, símbolo de la diosa Isthar, puerta de Isthar (605-562 a.C.). Museo de Pérgamo. Fuente: https://es.m.wikipedia.org/wiki/Archivo:Pergamon_Museum_Berlin_2007113.jpg
Ninguna ciudad fue tan temida, admirada, destruida y reconstruida como Babilionia, convirtiendose en el centro intelectual, cultural y religioso de toda Mesopotamia. Hasta el año 1792 a.C. con el rey Hammurabi, Babilonia no alcanza ninguna relevancia política. Hammurabi la transforma en la capital de un gran imperio (Charpin, 2021). Entre 1570 y 1555 a.C. Babilonia cae y es controlada por la dinastia Kasita y entre el 734 y el 627 a.C. por los reyes neoasirios. En el 626 a.C. y bajo el reinado de Nabopolassar, dio comienzo la última etapa de esplendor de Babilonia, él inicia el gran embellecimiento de la ciudad, entre otras obras, restaura y amplia el zigurat, conocido como ¨La Torre de Babel¨.
Le sucedió su hijo Nabucodonosor II, que llevará durante su reinado (604-562 a.C) al imperio Babilónico a su máximo apogeo y convertirá Babilonia en una de las maravillas del mundo. Tras su muerte, se inicia la decandencia y finalmente la desaparición del imperio Neo-babilónico.
Babilonia se encuentra a 90 km de la ciudad de Bagdad, situada a ambas riberas del río Eúfrates y también cerca del Tigris, lo que la permitía controlar el paso fluvial de toda Mesopotamia central.
Recreación de Babilonia realizada para la revista histórica Arqueología e Historia Desperta Ferro nº 10 por J.R. Casal Fuente: https://algargosarte.blogspot.com/2014/09/babilonia-la-ciudad-de-nabucodonosor-ii.html
Todos estos aspectos de la ciudad y su composición se han podido obtener de las ¨Tablillas de Tintir¨, cinco tablillas de arcilla con escritura cuneiforme. Estas tablillas recogen la descripción topográfica de la ciudad, sus templos, puertas, murallas, calles, barrios y puertas. De hecho, el plano de la ciudad de Babilonia se extrajo de las tablillas IV y V.
Tablillas de Tintir, el mapa del mundo (s. VI a.C.). Museo Británico. Fuente: https://www.britishmuseum.org/collection/object/W_1882-0714-509
La ciudad de Babilonia era inmensa, con forma de rectángulo irregular de 1.5 por 2.5 km y su superficie total se calcula en 1000 hectáreas, de las que 375 hectáreas correspondían a la ciudad interna.
Plano de la ciudad de Babilonia según (Marzahn, 1993). Fuente: chrome-extension://efaidnbmnnnibpcajpcglclefindmkaj/http://www.amigosdelmuseoarqueologicodelorca.com/alberca/pdf/alberca5/11-5.pdf
La defensa de la ciudad la constituía una doble muralla que medía 18 km, con torres de defensa cada 15 metros. Delante de la muralla se construyó un foso navegable bañado por las aguas del Eúfrates, se podía acceder a las seis puertas principales de la ciudad a través de los puentes construidos en el foso.
La muralla exterior se conocía como Ingur-Enlil (el Dios Enlil ha mostrado su favor) y la interior era conocida como Nilit-Enlil. La ciudad tenía ocho puertas para acceder a ella, teniendo cinco de ellas nombres de dioses, Marduk, Samas, Adad, Enil e Istar. De las tres restantes, una estaba dedicada al rey y las otras dos a los templos de Uras y Zabada.
La calle procesional, principal vía de acceso que empezaba en la puerta de Isthar, se conocía como Ay-ibur-sabu (que el arrogante no pase). Ésta llegaba hasta el centro de la ciudad. El centro religioso de la ciudad era el barrio de Eridu, en el se concentraban 14 templos, entre los que destacaba el templo de Egasil dedicado al dios Marduk y el zigurat cuyo nombre era Etemenaki.
Recreación avenida procesional, principal puerta de entrada a la ciudad de Babilonia. Museo de Pérgamo. Fuente: https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj4UyBgJwIRJmPIHsm8oTr8kI900fNoQX1ZTf7Udg7ay5oZWvG06KdBo8E9A6AFtodncdVu-KzUpKIJCB3Mz7tt2sI94jRm1CnBoQn7PUn4zQ6f6rNObnJu-6eGe5ZkZjrNLa_BAZEyo4e_/s1600/Pergamon_Museum-Berlin_2007109.jpg
La puerta de Isthar, como hemos comentado era la puerta principal de acceso por el norte. Su nombre hace referencia a la diosa Isthar, diosa de la guerra y el amor y daba acceso al templo dedicado al dios Marduk.
Sus restos se descubrieron a principios del s. XX, siendo transportados al Museo de Pérgamo en Berlín, donde se reconstruyó.
La puerta tenía unas dimensiones considerables, 14 metros de alto por 10 de ancho y destaca por su decoración de cerámica vidriada, sobre todo lapislázuli, que le da ese característico y precioso color azul.
Están representados en hileras, toros, dragones y leones, representando a los dioses Adad, Marduk e Isthar. El pasillo interior de la puerta, esta decorado con una boveda de cañon. Tanto la zona inferior de la puerta como la boveda, están decoradas por motivos florales. Había dos esfinges dentro del marco de la puerta que no se han podido ni recuperar ni reproducir.
Es sin duda, una obra maestra, que jugaba con el color azul de tal forma que destacaba de una manera brillante sobre el resto de edificaciones.
Puerta de Isthar (605-562 a.C.). Museo de Pérgamo. Fuente: https://historia.nationalgeographic.com.es/a/puerta-ishtar-secretos-monumental-entrada-a-babilonia_18645
Uro, especie de toro extinta, representa al dios Adad, puerta de Isthar (605-562 a.C.). Museo de Pérgamo. Fuente: https://algargosarte.blogspot.com/2014/09/babilonia-la-ciudad-de-nabucodonosor-ii.html
Dragón Mushussu, símbolo del dios Marduk, puerta de Isthar (605-562 a.C.). Museo de Pérgamo. Fuente: https://historia.nationalgeographic.com.es/a/cinco-detalles-sobre-imponente-puerta-ishtar-que-querras-conocer_20782
Leones de ladrillo vitrificado que decoraban parte de la vía de las procesiones que llegaba a la puerta de Isthar (605-562 a.C.). Museo de Pérgamo. Fuente: https://historia.nationalgeographic.com.es/a/puerta-ishtar-largo-viaje-babilonia-hasta-berlin_20786
Pero quizás, una de las partes más detacadas de la puerta de Isthar, es una larguisíma inscripción que aporta mucha información sobre la vida en la ciudad y el acontecer religioso e histórico de la zona. Además, en esta inscripción, se puede leer por qué Nabucodonosor II mandó construir la puerta e incluso como mandó decorarla. Esta inscripción deja ver el gran dominio de las técnicas de decoración y construcción de los babilonios. La transcripción de los renglones 24 al 53 dice así: ¨ Las entradas a las puertas de las murallas de Imgur-Enlil y Nimit-Enlil habían quedado cada vez más bajas a raíz de los terraplenes en las vías de Babilonia. Quité dichas puertas y, con asfalto y ladrillos, puse su fundamento a nivel de las aguas subterráneas; mande hacer las nuevas puertas con ladrillos de piedra azul y preciosas figuras de toros y dragones. Como tejado, cubrí las puertas longitudinalmente de inmesos cedros. Las batientes (eran) de cedro con guarniciones de bronce. en todas las puertas instalé umbrales y goznes de mineral fundido. erigí toros salvajes y dragones furiosos en el interior de las puertas, las dote con magnificiencia y suntuosidad para que toda la humanidad las contemple asombrada¨. (Marzhan, 1993, pág 30.).
Inscripción lado izquierdo puerta de Isthar (605-562 a.C.) Museo de Pérgamo. Fuente: https://pepetoideas.blogspot.com/2014/08/la-puerta-de-ishtar-y-los-restos.html
Escritura cuneiforme en la inscripción de la puerta de Isthar (605-562 a.C). Museo de Pérgmo. Fuente: https://pepetoideas.blogspot.com/2014/08/la-puerta-de-ishtar-y-los-restos.html
La puerta de Isthar, con su brillante color azul, servía de símbolo a sus ciudadanos y de advertencia a sus visitantes del poder y la riqueza de la ciudad.
Bibliografía
Para esta entrada se han utilizado los distintos materiales facilitados por el profesor D. José Matesanz del Barrio, que incluyen apuntes, artículos científicos, videos y conferencias. Aparte de dicho material, para la realización de este trabajo he utilizado la siguiente bibliografía.
Charpin, D. (2021). ¨Hammurabi of Babylon¨. London. Bloomsbury Academy.
Marzahn, J. (1993). ¨La puerta de Isthar en Babilonia¨. Editor digital: Readman. Consultado en:
Montero Fenollós, J.L. (2007). ¨ Babilonia y Nabucodonosor: Historia antigua y tradición viva¨ . AlbercA, 5. Págs. 171-188. Consultado en: chrome-extension://efaidnbmnnnibpcajpcglclefindmkaj/http://www.amigosdelmuseoarqueologicodelorca.com/alberca/pdf/alberca5/11-5.pdf
Comentarios
Publicar un comentario